Medita En Esto

La Biblia nos dice que el Señor Jesús salía de Betania y en el camino le dio hambre.  Al ver una higuera frondosa a la distancia, se le acercó porque quería comer del fruto que se encontraba en ella.  Al rebuscar en sus ramas, solamente encontró hojas pero nada de fruto.  La Biblia nos dice que “Entonces Jesús dijo a la higuera: Nunca jamás coma nadie fruto de ti.”  Los discípulos se quedaron asombrados y a lo mejor se preguntaban porque el Señor Jesús se molestó tanto con una pobre higuera que no tenía la culpa que Él tuviese hambre.  Sin embargo, había una lección importante que el Señor Jesús quería enseñarles a los discípulos.  El próximo día, al pasar por el mismo camino, para  sorpresa de los discípulos, la higuera que el Señor Jesús había maldecido estaba seca…  Los discípulos asombrados de este hecho le trajeron a memoria al Señor Jesús que esta higuera seca era la misma que Él había maldecido el día anterior.  Te preguntas ¿Por qué habrá maldecido el Señor Jesús a la pobre higuera?  La respuesta es simple: porque aparentaba algo que no era.  Así hay muchas personas en el mundo hoy en día, aparentan algo que no son.  En la casa son de una manera y en la calle de otra.  En el trabajo se comportan de cierta manera y en la iglesia son completamente diferentes.  La gente quiere presumir en frente de sus amigos y aun enemigos para que se hable bien de ellos.  Sin embargo, la Biblia nos dice que Dios conoce el corazón y las intenciones del hombre.  Dios no está buscando a personas frondosas que aparenten tenerlo todo bajo control.  Por lo contrario, Dios busca a personas que pueden presentarse delante de el Señor y decirle no tengo nada ni soy nada, pero me humillo delante de Ti . Esta actitud es la que Dios busca para poder acercarse y permanecer con nosotros.  Por esto la Biblia nos dice que Dios atiende al humilde mas mira de lejos al altivo.  El Señor no quiere higueras frondosas que aparentan estar bien.  Dios quiere que te presentes tal y como eres, porque al presentarte así, Él podrá tocar tu vida para que en ella se produzca verdadero fruto.  No un fruto de apariencias huecas y vacías, sino un fruto que permanece para siempre.  Un fruto basado en un verdadero encuentro con Dios.  Si estas esperando ser alguien bueno para entonces acercarte a Dios, te tengo malas noticias, serás considerado como la higuera frondosa que aunque aparentaba mucho, no tenía nada…   Medita en esto…


Leave a Reply